noticias tlf

Vol. xxix #1

Marzo 2008



Actuar en Español

--Margo Wickesser




En 1958, escribí lo siguiente: 'No hay grandes diferencias entre realidad y ficción, ni entre lo verdadero y lo falso. Una cosa no es necesariamente verdadera o falsa; puede ser al mismo tiempo verdadera y falsa.' Creo que estas afirmaciones aún tienen sentido, y aún se aplican a la exploración de la realidad a través del arte. Así que, como escritor, las mantengo, pero como ciudadano no puedo. Como ciudadano he de preguntar: ¿Qué es verdad? ¿Qué es mentira?
--Harold Pinter

Rigo pronuncia estas palabras que abren nuestra presentación de Una Noche con Harold Pinter: el Arte, la Verdad y la Política. Estoy sudando y no sólo por el indescriptible calor hondureño. Estas palabras son el pie para mi primera entrada en el escenario del teatro la fragua y la primera vez que actuaré en español. A mi lado, Gimena espera para entrar conmigo. Me sonríe, fresca y tranquila. Miro al escenario para ver la entrada de Tony. Está concentrado y relajado. "OK Margo," me digo, " a ver si lo puedes hacer." Entro al escenario usando mis tacones altos, la empresaria gringa por excelencia, y en mi mejor español digo, "Ah, buenos días. ¿Es usted el Sr. Cordero?" Ahí vamos. No nos podemos detener ahora.

Vine al teatro la fragua para mejorar mi español. Desde que mis hijos llegaron a la edad adulta, trabajo para convertirme en intérprete legal en Chicago. Después de que me aplazaron en un exámen, contacté a Jack en Honduras. Jack y yo éramos amigos y compañeros de estudios en The Goodman School of Drama en Chicago en los años 70. Él estaba en el programa de dirección y me asignó varios papeles en sus montajes. "Por supuesto. Ven. ¿Quieres actuar en la obra de Harold Pinter? Hay mucho lenguaje buenísimo. Será buena práctica. Encárgate de aprender el texto. Vamos a tener dos semanas para incorporarte a la obra. Oh, y puedes enseñar clases de ballet, tambien." El siguiente día recibí el texto y la asignación de ísiete papeles! íCaramba! Para los próximos cuatro meses voy a actuar íen español!

El texto fue fantástico e ingenioso. Consistía de varias viñetas y piezas cortas que se entrelazaron dentro de selecciones del texto de su polémico discurso de aceptación del Premio Nobel de 2005. Pinter es uno de los más acérrimos críticos del belicismo de Estados Unidos y Gran Bretaña y aunque algunas de las piezas fueron escritas en los años 50, parece que hubieran sido escritas ayer. Harold Pinter pareciera ser una elección extraña para teatro la fragua pero esta obra acaba por ser muy pertinente para el público Hondureño, principalmente por su enfoque en el imperialismo y el clasismo.

La primera vez que comtemplé el teatro quedé impactada. Los que lo han visitado saben que el teatro está ubicado en un terreno hermoso y extenso de muchos árboles maduros. El interior es un espacio enorme y abierto con altos cielo rasos. Alrededor del escenario hay largas cortinas fluídas que ondulan en la brisa. En una noche de presentación, el teatro la fragua parece encantador y mágico.

La primera mañana tuve la oportunidad de mirar un ensayo de Cuentos Hondureños: Tío Coyote y Tío Conejo. Me quedé sorprendida por el alto nivel de talento de los actores. No sé qué esperaba pero no era algo como esto. Todos son actores consumados, cantantes, bailarines, malabaristas y mimos. Tienen un genial sentido cómico de la oportunidad y voces fuertes y encantadoras con buena dicción. Están en forma, flexibles, listos, concentrados y creativosàcada uno es un profesional de verdad.

Todo esto fueron buenas y malas noticias para mí. Las buenas noticias fueron que trabajar con estos actores sería un verdadero desafío. Las malas noticias fueron que trabajar con estos actores sería un verdadero desafío. Y tendría que realizar toda la cosa en español. Actuar las obras de Harold Pinter es un desafío en cualquier idioma. "OK Margo," me dije, "a ver si lo puedes hacer."

Me puse a aprender mi texto y a hacer el esfuerzo intelectual en que consiste la exploración de un papel. En los ensayos, la pronunciación del texto era a veces peliagudo para mí (y desgraciadamente, la memorización ha llegado a ser más difícil que antes, en inglés así como en español). Cometí montones de errores pero los actores de la fragua están obviamente acostumbrados a trabajar con los artistas gringos que llegan al teatro. Me corrigieron cuando los cometí. Me dieron mucho en el escenario. Encubrieron mis equivocaciones. Me enseñaron a decir palabrotas y cantar el reggaetón. Intentamos y probamos ideas en el escenario. Reíamos. Sudábamos. Ensayábamos mucho. Con el tiempo, me dí cuenta de que me habían aceptado dentro de su familia, lo que fue un gran honor. Y sí estaba actuando en español.

Yo tenía dos viñetas con Yulissa, una belleza hondureña y actriz esplendida. Nuestras escenas nos obligaron a crear personajes con relaciones complejas. Estas escenas eran lo más gratifcante para mí como actriz. Ella nunca olvidó su texto (al contrario, conoció todo mi texto y me lo pasó cuando era necesario), cuidaba mi utilería y mis entradas al escenario. Nos reíamos todo el tiempo.

Gimena me hizo saber en qué terreno estaba parada. Es una mujer guapa, graciosa y talentosa quien me explicó como van las cosas en teatro la fragua en particular y en Honduras, en general. Pasamos mañanas perezosas tomando café y platicando. Me encantó su actuación. Nos hicimos buenas amigas.

Tony es uno de aquellos actores que está muy relajado y natural en el escenarío. Hay una gran honestidad en su actuación; puede interiorizar una sugerencia de la manera justa. Trabajar con él hizo que mi actuación mejorara.

Rigo es veterano en la fragua y tiene años de experiencia. Sus personajes tienen matices, inteligencia y autenticidad. Me hubiera gustado tener más oportunidad de actuar con él. Fue muy generoso conmigo durante las siete semanas que fuimos compañeros de casa. Chito también es veterano de la fragua. Lleva mucha energía a su actuación, y tiene una presencia considerable en el escenario. Actuabamos una escena cómica juntos: estaba 'en el momento' tanto que yo tenía que poner mucha atención porque de repente improvisaba nuevas cosas. Edy ha trabajado con la fragua desde sus principios. Hoy en día, está dirigiendo obras más que actuar en ellas. Es un genio para buscar sentido en un papel y me ayudó mucho con mis escenas difíciles. Un actor genial, tambien.

Después de las presentaciones en Progreso, fuímos de gira y tenía la oportunidad de obsevar la belleza espectacular del país. Dormimos en conventos, hoteles y en una casita de dos cuartos en la playa. Comimos comida básica pero apetitosa en comedores al borde del camino y viajábamos en ese busito desvencijado y poco fidedigno, riéndonos, platicando o esperando nomás...para llegar, para salir, para arreglar llantas punchadas, para descargar, para cargar, para comer, para hacer cualquier cosa.

En Progreso, enseñaba clases de ballet a tres grupos de niñas entre 4 y 9 años. Esta tarea no me había agradado mucho: hacía años que no bailaba. Mis pequeñas bailarinas me hicieron olvidar eso y tenía muchos momentos gratificantes con ellas. También cantaba con los niños de Progreso mientras ensayaban las canciones para su presentación de Navidad Nuestra y el día en que salí de Honduras me hicieron una presentación de despedida especial. Este país, esta ciudad y esta gente me han dejado "fraguada" con ellos para siempre y nunca lo olvidaré.

"pero...como ciudadano he de preguntar: ¿Qué es verdad? ¿Qué es mentira?"

Según Pinter, en el Arte la ficción y la realidad pueden existir con facilidad en el mismo momento, y el conjunto puede revelar la verdad. Sin embargo, Pinter nos advierte que es preciso distinguir entre las condiciones de nuestro mundo que sean verdaderas y las que no lo sean.

En Honduras ví familias que vivían en casas construídas de ramas de árboles, sin plomería, sin agua ni electricidad. Ví niños viviendo en las calles. Ví zonas de viviendas donde el gobierno permitió que abrieran las compuertas para dejar entrar las aguas crecientes y desbordantes que inundaban centenares de familias, mientras mantenian cerradas las compuertas que protegen los campos bananeros. A pesar de la fertilidad de la tierra y la posibilidad de cultivar todo el año, hay gente en Honduras que sí muere de desnutrición. La deforestación está por todas partes. La corrupción de los políticos y la policía es endémica. Es comprensible que una gran parte de la población esté demoralizada.

Jack Warner, los actores y la administración de teatro la fragua están despertando la creatividad de su público como un medio para solucionar problemas verdaderos. Por medio del drama, la música y la danza, usan el teatro como una herramienta educacional para enseñar y afirmar la riqueza, belleza y poder de los valores Hondureños. Se están dirigiendo a las verdades crudas de la pobreza, el hambre, la corrupción y los recursos malgastados. teatro la fragua es un ambiente en donde las arenas movedizas de la imaginación y la fantasía hacen un trabajo poderoso y serio. Fue un gran honor haber sido parte de él.

--Margo Wickesser

P.D.: Acepto contratos para actuar en español, inglés o espanglish.







Para hacer una contribución al trabajo de teatro la fragua :


Contribución en línea

 

Contribución por teléfono

 

Contribución por correo

Cliquee aquí para hacer una contribución en línea con una tarjeta de crédito.  Toda contribución en línea está en el sistema GeoTrust para la máxima seguridad en línea.

 

Llámenos desde dentro de los Estados Unidos a 1-800-325-9924 y pregunte por "the Advancement Office" (sólo inglés).

 

 Mande un cheque para teatro la fragua a:

teatro la fragua

Jesuit Advancement Office

4511 West Pine Boulevard.

Saint Louis, MO 63108-2191

EE.UU.



Volver al índice de noticias tlf

Volver a la página principal de tlf

Escríbanos al teatro la fragua

Copyright © 2008 por teatro la fragua